DESCARGA EL PROTOCOLO

Estimados/as socios/as y colegas:

Como hemos informado, luego del acuerdo logrado tras el término del funcionamiento de la Mesa con el Gobierno, a inicios de abril, demoramos seis semanas en suscribir la respectiva Acta de Cierre y, contra nuestros deseos y pronósticos, hubieron de transcurrir otros dos meses de intensos debates, con sucesivas  propuestas y contrapropuestas, para también estar en condiciones de firmar el Protocolo que fija los contenidos básicos del próximo proyecto de ley de Modernización de la DT, en lo que a las normas de una nueva y anhelada ley de plantas para fortalecer la carrera funcionaria, mejorar nuestras condiciones de trabajo y remuneración, y la atención que prestamos a las necesidades y urgencias de la Comunidad Nacional.

Dijimos siempre que, por una parte, queremos avanzar rápido y decididamente detrás del objetivo final, cual es lograr que se apruebe la nueva ley de plantas de la DT, pero que, por la otra, no podíamos aceptar que por dicho apuro, se cayeran o quedaran desperfiladas partes y contenidos relevantes de las ideas y acuerdos que habíamos alcanzado.  No fue nada fácil, tuvimos muchos y serios desencuentros, pero más allá de las responsabilidades de unos u otros, nos quedamos con la satisfacción de estimar que la causa directa de la demora en concretar este esfuerzo, radicó en lo ambicioso e innovador del proyecto, con reales aportes para hacerse cargo y solucionar serios problemas estructurales acumulados por décadas, ante una evidente crisis regulatoria y excesiva discrecionalidad administrativa. Por ejemplo, nos demoramos el último par de semanas sólo en detallar criterios objetivos, transparentes, no discrecionales y justos –sin permitir privilegios ni tampoco castigos- para orientar el masivo traspaso de contratas a las nuevas plantas, lo que pedimos debían quedar definidos en la ley. Y aunque en éste y otros aspectos estamos plenamente conscientes de algunos detalles que quedan por precisar o incluso enmendar, confiamos en que, simplemente por velar por la propia integridad y calidad del proyecto, así se hará en las etapas venideras.

Cada uno/a de Uds. podrá apreciar la envergadura y profundidad que se ha alcanzado, al repasar el texto del Protocolo que, satisfechos y orgullosos de haber contribuido a generar, hemos resuelto suscribir ambas Asociaciones, por la unanimidad de los integrantes de ambos Directorios Nacionales, respaldados además en amplias y diversas instancias internas de participación y resolución, que se pronunciaron en su oportunidad a favor de consolidar este gran logro.

Por supuesto, este es un logro compartido indisolublemente con las autoridades, y agradecemos a todas ellas en la persona de la Sra. Presidenta de la República, que, por sus propios fines de mejor gestión del Gobierno y la Administración del Estado, ha impulsado este proyecto y ha coordinado para ello la labor de los Ministerios de Trabajo y Hacienda, con sus más altas autoridades, junto al Director y al Subdirector de la Institución, y a los respectivos equipos técnicos.

Estamos plenamente conscientes de que éste es un hito muy relevante, pero es solo una etapa más detrás del objetivo final y, como se señala con nitidez en el mismo Protocolo, esperamos en algunas semanas más el ingreso del proyecto de ley al Congreso. Y luego de este momento de satisfacción compartida, el desafío inmediato e intenso será enfrentar las nuevas y definitivas etapas que ahora se abren, en las que estaremos, todos/as juntos, atentos y presentes, reforzando el compromiso de actuar en forma unitaria, propositiva, responsable y decidida, proyectando en el presente y en el futuro lo mejor de nuestra historia y tradición sindical, como Funcionarios/as del Trabajo que somos.